martes, 27 de marzo de 2007

Argentina: Buscan multiplicar las exportaciones de carne orgánica


"El futuro para el sector de la carne orgánica es excelente, el problema es el individualismo" , sostiene Roberto Rapella también ganadero y presidente de la Cámara de Certificadoras de Productos Orgánicos (CACER)."Lo que nos falta es unirnos", critica.
La nota refiere que "la ganadería sustentable" –así la llaman- apenas asoma en el campo argentino. Del total de exportaciones de carne vacuna, sólo el 0,1 por ciento corresponde a cortes certificados como orgánicos. Mientras la demanda externa crece impulsada por los consumidores que eligen alimentos naturales y respetuosos del medio ambiente, en la Argentina no hay oferta.
"Podríamos triplicar el volumen de lo que exportamos", dice el, presidente de Eco Pampa , la empresa dueña de casi todas las exportaciones de carne orgánica en el país.
¿Cómo funciona el negocio?
El manejo de un campo orgánico tiene pautas específicas . "En un campo común podés usar herbicida, acá tenés que ver otras alternativas". Su empresa les compra a productores de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y La Pampa.
Y le vende todo a Tesco, la cadena de supermercados más grande de Gran Bretaña. "Viene una seca muy grande y tenés que comprar pasto orgánico o trasladar la hacienda a otro campo ecológico", agrega.
Por eso, muchos coinciden en que los productores se dividen en dos grupos: los convencidos, que se pasaron a orgánico porque defienden la fertilidad del suelo y el bienestar del animal y los que tienen un campo que por sus condiciones no les justifica el uso de fertilizantes y agroquímicos.
Entre los primeros está el presidente de MAPO (Movimiento Argentino para la Producción Orgánica) y ganadero ecológico. "Los productores orgánicos hacen un ciclo cerrado, hacen cría e invernada (la etapa de engorde del animal)", explica. Entonces, los que hacen solo cría o solo invernada a veces quedan fuera de la cadena comercial.
Un productor pampeano con campos en el Caldenal, una zona no apta para la agricultura Cría ganado orgánico pero no encuentra a quien venderle para hacer invernada y él no puede hacer el engorde en su campo porque se necesitan otras pasturas para que el animal aumente significativamente de peso.
"El futuro para el sector de la carne orgánica es excelente, el problema es el individualismo" , sostiene el también ganadero y presidente de la Cámara de Certificadoras de Productos Orgánicos (CACER)."Lo que nos falta es unirnos", critica.
Según él, les permitiría ampliar mercados. De los grandes consumidores de productos orgánicos, Estados Unidos, la Unión Europea y Japón, la carne orgánica vacuna sólo llega a las góndolas inglesas.
Aunque el tironeo aflojó, los productores se quejan de las vedas que impuso el gobierno a la exportación de carne para mantener los precios quietos en el mercado interno. "Uruguay sacó ventaja de la situación argentina y está posicionando su carne natural", reclaman.
Con la aftosa controlada y una política que subvenciona los cortes populares para el consumo interno, los vecinos han salido al mundo. Lo mismo esperan que suceda ahora a nivel local.
Es cierto que el sobreprecio que se paga afuera por un producto orgánico ya no es tan grande, pero es el sector que más crece en la industria alimenticia mundial.
Por ejemplo, en Gran Bretaña, que compra el 99 % de la carne orgánica que exporta la Argentina, se gastaron US$ 3.2 miles de millones en 2005 en alimentos ecológicos, 30% más que en 2004.
Allí, las grandes cadenas de supermercados agrandan constantemente el espacio destinado a productos ecológicos y ahora enfrentan la llegada de un gigante del sector: Whole Food Markets, un supermercado estadounidense que sólo vende orgánico.
El mercado local para la carne orgánica es inexistente . Todos los involucrados sostienen que es indispensable que se desarrolle el consumo interno, pero los compradores nacionales no están dispuestos a pagar más por un producto que no ven como diferencial.
Por esta razón, los productores quieren promocionar los beneficios de comprar orgánico. El gobierno y el sector privado esperan que un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) de US$ 900.000 impulse la producción orgánica en el país, que estuvo entre los pioneros mundiales del sector.